las once de las dobles jornadas

eloncereal (FECHASDOBLES)
1.- Lesiones por sobrecarga física:
Los jugadores disputan tres partidos en una semana, lo que aumenta el riesgo de lesiones musculares. Según estudios del Journal of Sports Science, la probabilidad de lesión aumenta un 25% cuando no hay suficiente descanso entre partidos.
2.- Baja calidad del espectáculo:
Con poco tiempo de recuperación y entrenamiento, los equipos bajan su nivel. Se ve en partidos más lentos, menos goles y mayor cantidad de errores.
3.- Desgaste de plantillas cortas:
Equipos con menor presupuesto no pueden rotar como los grandes, lo que profundiza la desigualdad deportiva futbolera.
4.- Menor asistencia al estadio:
La afición no suele llenar estadios entre semana. La taquilla baja, especialmente en partidos que se juegan martes o miércoles por la noche.
5.- Afecta el rating televisivo, pero beneficia a los partidos moleros de la selección:
Muchos juegos entre semana tienen bajo rating porque compiten con horarios laborales y escolares. Las televisoras pierden interés en invertir en buenos análisis o producción, pero lo compensan con los partidos veraniegos de los ratones verdes.
6.- Confusión en la tabla de posiciones:
Algunos equipos juegan antes o después que otros, y la tabla queda desequilibrada, lo cual afecta la percepción de quién va arriba o quién pelea por repechaje.
7.- Afecta la preparación táctica:
No hay tiempo suficiente para estudiar al rival ni hacer ajustes tácticos. Los entrenadores toman decisiones apresuradas y muchas veces improvisadas.
8.- Compromete torneos internacionales:
Cuando hay equipos en Concachampions o Leagues Cup, las fechas dobles los obligan a jugar hasta cinco partidos en dos semanas. Eso puede afectar su rendimiento en todos los frentes.
9.- Fatiga mental para jugadores y entrenadores:
No es solo físico: el poco tiempo para digerir un resultado (bueno o malo) genera presión y ansiedad, afectando el rendimiento en el siguiente juego.
10.- Mayor número de expulsiones y errores arbitrales:
El ritmo frenético y el cansancio provoca más roces, faltas fuertes y decisiones arbitrales precipitadas. Aumentan las tarjetas rojas y los reclamos.
11.- Desvirtúan la regularidad de la temporada y hacen más irregular el torneo corto:
En vez de premiar la consistencia, favorecen a quienes tienen plantillas amplias o mejor suerte con el calendario. Puede influir directamente en la clasificación a liguilla o repechaje.